La condenación es el fruto prohibido del engaño. Que fácil creernos el engaño y que difícil quitárnoslo de encima (asoleados con acusación, amenaza y apremios). Todo ciclo tiene su comienzo y el ciclo continúa con la condenación.
Padre, gracias por que en la cruz de Cristo llevaste mi condenación
para que la condenación no me lleve a cerrarme (de tus planes, promesas y premios).
PLÁNTATE. PRONÚNCIALO. PÍSALO. – LA FORTALEZA DEL ENEMIGO. – ZACARÍAS 3:1-7
1.-¿Has alguna vez sido acusado de algo que no hiciste? ¿Qué hiciste?¿Cómo respondiste a esa situación?
2.- Comparte por favor algunos ejemplos de acusaciones que escuchas con regularidad en tu mente. ¿Puedes dar un ejemplo de cómo te han afectado?
3.- ¿Cómo te ha ayudado el distinguir entre la convicción del Espíritu y la condenación de Satanás?
4.- La estrategia para esta semana es enfrentar la acusación con silencio (no hacer caso. Tal vez esto sea lo más difícil ) y con Su Palabra. Tomar la espada del Espíritu. ¿En qué verdades bíblicas te necesitas enfocar para destruir las acusaciones del enemigo? Comenten y oren unos por otros. Reciban y den ánimo.
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