Así como el ser realistas no significa que no tengamos fe, así el que seamos optimistas, el que la tengamos. Para Dios no es una osadía el que le digamos cómo estamos, realmente, mientras creemos por sus promesas para nuestras vidas. Es en este tipo de conversaciones que nuestra confianza comienza, crece y se completa. Dado quién es Cristo y lo que ha hecho por y para nosotros, es posible ser honestos sin desanimarnos.
Padre, aún y cuando hay áreas en mi vida que están quebrantadas y heridas, decido alabar tu nombre en este día.
Por tu obra en mi corazón. Por tus promesas de salvación. Por la esperanza, la fe y el amor que me has dado en Cristo Jesús.
COMENZAR DE NUEVO – ES LO QUE ES, PERO NO ES LO QUE PARECE – ROMANOS 4:18-21, MARCOS 4:30-32
1.- ¿Qué árboles conoces y cuál es tu favorito? ¿Qué te llamó la atención de la comparación que hiciera Jesús del Reino de Dios con semillas?
2.- Lee por favor Romanos 4:18-21 y Marcos 4:30-32. ¿Qué te resaltó de este pasaje y/o del mensaje de esta semana?
3.- Comparte por favor de algún momento en tu vida, en donde pedías la ayuda de Dios y a la vez, enfrentabas los hechos tomando responsabilidad de la situación.
4.- Nuestro potencial en la vida está ligado a las promesas y propósitos de Dios. ¿De qué manera sabes que estás viviendo por los propósitos de Dios siguiendo Sus promesas?
5.- Lo pequeño son nuestras debilidades, limitaciones, pecados y problemas que Dios puede usar para traernos sanidad y prosperidad. ¿Qué cosas necesitas soltar para rendir completamente tu confianza y seguir a Cristo en Sus promesas?